¿Recuerdan el grupo de amigos con el que siempre perdían sus fines de semana antes de que el mundo adulto se posicionara en sus mentes? Yo lo tuve. No lo digo porque hayan muerto, sino porque todos crecimos y somos adultos con vidas, ocupaciones y direcciones diferentes. Hans, Josseline, Estefany, Gaby, Omar, Renata, mis hermanos y yo. No cambiaría en ningún momento la historia que tuvimos, porque tuvimos una gran historia. Juntos reímos, lloramos, viajamos, peleamos y nos defendimos. En más de una ocasión nos vimos atacados, queriendo ser separados, sembrando rencor en nuestras mentes y corazones. En más de una ocasión tuvimos que defender a alguien de la banda queriendo ser lastimado. Muchas veces tuvimos que ayudar a alguno de nosotros. Muchos pasteles de cumpleaños y navidades comiendo juntos. Casi todos los fines de semana por casi siete años, nos congregábamos en los mismos lugares: en el colegio donde estudiaba o en la casa de la chica que vivía cerca de...