Muchas veces creemos que al enfermarnos de algo, el mundo se acabará. Simplemente hacemos omisión de que la familia hace todo lo que puede para entender nuestra situación y pues los enfermos ni en cuenta.
El último fin de semana estuve pegado a la cama. Lo bueno hubiera sido que me acompañara alguien deseable, pero no. Tuve que aguantar a la peor de las compañías a mi lado y en serio que esta es una mala junta: la gripe.
Para alivio de todos, se trataba de una gripe normal. Acompañada siempre de sus buenas amigas "congestión" y "tos". No me han dejado hasta hoy, he intentado por varias horas echarlas de mi casa, pero no hay forma de que lo hagan. Al parecer creo que les gusta vivir conmigo.
Cuando empece con la idea del blog, no pensé que seria tan atractivo a las enfermedades.
Lo cierto es que cuando las enfermedades vienen, todo el mundo se aleja, solo quedan quienes realmente te aprecian y si te has portado bien con alguna chica, pues siempre habrán flores o chocolates que te esperan al recuperarte.
¡Pobres los que se enferman solos!
Comentarios
saludos nos seguimos?